4/5
Anaya
Desconexión
Neal Shusterman
Saga
Tetralogía
Unwind
Reseña: Desconexión - Neal Shusterman
21:25¡Buenas! El comienzo del fin de semana es con una de las reseñas más largas de la historia de este rinconcito (por no decir la que más). Sentiros bienvenidos a leer mi tochón.
Unwind · Unwind #1 · Anaya Editorial · 414 páginas · 17,00
OPINIÓN PERSONAL
Desconexión nos presenta un nuevo mundo, que realmente no es un nuevo mundo pero lo parece. Ya empiezo a no explicarme y ni he empezado. Estamos en Estados Unidos, después de la Segunda Guerra Civil (o Guerra Interna) se aplicaron un conjunto de leyes para mejorar las condiciones de vida de la población. La que más afecta a nuestros personajes es el “Tratado Vital”, en el que cualquier adulto que sea responsable de un adolescente entre 13 y 18 años (creo recordar) puede hacer que sea desconectado.
Así se conocen nuestros protagonistas. Todos ellos acaban de enterarse de que van a ser desconectados (bueno, más o menos) y para huir de ese fatídico destino tendrán que apoyarse unos en otros aunque sean completos desconocidos, y sobrevivir hasta los 18, donde se librarán de la ley y nadie podrá decidir nada sobre ellos.
En primer lugar tenemos a Connor, quién fisgoneando entre algunas cosas de sus padres encuentra su documento de desconexión, la cual va a suceder en unas pocas semanas, y sus padres no le han dicho nada. Huye de su casa y de todo lo que conoce y no llega muy lejos hasta que accidentalmente provocará el choque de un autobús.
Risa va en ese autobús. Le acaban de decir en el centro en el que vive, ya que es huérfana, que su servicio como pianista no es necesitado y la mandan a desconectar. Cuando el autobús choca, ve la oportunidad perfecta y sale corriendo buscando algo de libertad.
«-Las causas están pasadas de moda. Nosotros creemos en el azar. Creemos en los terremotos y en los tornados. Creemos en las fuerzas de la naturaleza, y nosotros mismos somos fuerzas de la naturaleza. Nosotros somos el accidente, somos el caos. Somos la catástrofe del mundo.»
Lev es el más joven de una familia muy cristiana, donde tienen que entregar el diezmo; siendo él el correspondiente al 10% de los hijos, ya que es el décimo. Ha vivido toda su vida sabiendo su destino y no tiene problemas en hacerlo porque sabe que es algo sagrado y un honor.
Cuando el coche de sus padres tiene un accidente, el padre Dan, que es una persona muy próxima a él le dice que huya. Antes de que pueda dar dos pasos, ya se ha topado con Connor.
Así empieza esta historia que llevará al trío a vivir una historia llena de acción. ¿Conseguirán esconderse durante tanto tiempo?
Menudo resumen, madre mía. Aunque no sé si alguien se tomará la molestia de leer esto, puesto que tiene pinta de que va a salirme una reseña larga hoy; la verdad es que yo fui con el libro totalmente a ciegas. Me encanta cuando pasa eso y aun así el libro acaba gustándote mucho. Surprise.
Antes de meterme en otra cosa, voy a hablaros del escenario en el que está ambientada esta tetralogía. Me ha encantado. Es una sociedad cruel hasta decir basta, que ha perdido todos los valores relacionados con la humanidad y que ve la pérdida de vidas como mejor opción para el bien común. Este tipo de cosas me encantan porque me interesa mucho saber hasta dónde la imaginación de un autor puede llegar, cuando las bases son nuestro mundo.
Lev es el más joven de una familia muy cristiana, donde tienen que entregar el diezmo; siendo él el correspondiente al 10% de los hijos, ya que es el décimo. Ha vivido toda su vida sabiendo su destino y no tiene problemas en hacerlo porque sabe que es algo sagrado y un honor.
Cuando el coche de sus padres tiene un accidente, el padre Dan, que es una persona muy próxima a él le dice que huya. Antes de que pueda dar dos pasos, ya se ha topado con Connor.
Así empieza esta historia que llevará al trío a vivir una historia llena de acción. ¿Conseguirán esconderse durante tanto tiempo?
Menudo resumen, madre mía. Aunque no sé si alguien se tomará la molestia de leer esto, puesto que tiene pinta de que va a salirme una reseña larga hoy; la verdad es que yo fui con el libro totalmente a ciegas. Me encanta cuando pasa eso y aun así el libro acaba gustándote mucho. Surprise.
Antes de meterme en otra cosa, voy a hablaros del escenario en el que está ambientada esta tetralogía. Me ha encantado. Es una sociedad cruel hasta decir basta, que ha perdido todos los valores relacionados con la humanidad y que ve la pérdida de vidas como mejor opción para el bien común. Este tipo de cosas me encantan porque me interesa mucho saber hasta dónde la imaginación de un autor puede llegar, cuando las bases son nuestro mundo.
Voy a hablar del centro de la novela: la desconexión. No os voy a decir de qué trata porque eso es algo que debe leerse, pero básicamente si lo haces pierdes a tu hijo. El gobierno lo vende como que no, que simplemente separan cada uno de tus órganos pero el alma sigue viva. Pero qué me cuentas por favor. No sé, no es el tipo de cosas que me creo pero a la vez ocurre como en cualquier sociedad normal: que hay gente que se lo cree y gente que no. Lo que más me ha chocado de todo es lo normalizada que está esta situación en esta ambientación. Nadie va a mirar con malos ojos al vecino si desconecta a su hijo. Es una decisión que la gente toma día a día, como si de elegir el sabor del chupachup se tratase.
Esto me ha impactado desde que empecé a leer hasta la última página, y es el tipo cosas que me gusta encontrar cuando leo: que transmita algo. Ya sea asco, miedo o como es el caso impacto por lo que leo.
Esto me ha impactado desde que empecé a leer hasta la última página, y es el tipo cosas que me gusta encontrar cuando leo: que transmita algo. Ya sea asco, miedo o como es el caso impacto por lo que leo.
«De todas fomas, yo no iba a llegar muy lejos -dice Samson-, pero ahora, según las estadísticas, hay más probabilidades de que alguna parte de mí, en algún sitio del mundo, se convierta en algo excelente. Y prefiero ser parcialmente excelente que enteramente inútil.»
Otra cosa curiosa de la sociedad es lo que ellos llaman “colar la cigüeña”. No hay ningún tipo de aborto ni nada por el estilo, pero si cualquier madre o familia no quiere quedarse con el bebé lo que hacen es ponerlo en una casa cercana, la que sea, y dejarlo ahí. Si cuando abran la puerta los miembros no encuentran a la madre por ningún lado, el bebé es legalmente de ellos. Esto también fue un choque brutal porque ven el nacimiento de una nueva vida como algo totalmente diferente a nuestra sociedad, como si de un trozo de basura se tratase.
Paso a hablar de los personajes, que ha sido la segunda cosa que más me ha gustado después de la ambientación. Me han encantado, todos.
Connor es el típico malote con mucha rabia acumulada que tiene dotes de líder. Es un personaje que tiene de todo: partes buenas y partes malas, pero el autor sabe jugar con ellas para hacer un personaje que sinceramente me ha gustado mucho. Y del que he disfrutado leyendo. Y lo que es más importante: me lo he creído. Se nota la evolución del personaje, no de una manera muy exagerada durante la novela pero sí las consecuencias de todo lo que ocurre durante el libro se ven plasmadas en el nuevo Connor de las últimas páginas.
Risa ha sido de lo mejorcito que me he podido encontrar. Es una persona fuerte, con carácter, que no se da por vencida, muy inteligente y sarcástica. Tiene todos los ingredientes para convertirse en un personaje 10, y lo cierto es que lo es. El toque duro que puede llegar a adoptar es una de las cosas que más me gusta, sobre todo cuando lo saca. Y es muy inteligente, cosa que iréis apreciando a lo largo del libro. Eh, y pianista.
Otra cosa curiosa de la sociedad es lo que ellos llaman “colar la cigüeña”. No hay ningún tipo de aborto ni nada por el estilo, pero si cualquier madre o familia no quiere quedarse con el bebé lo que hacen es ponerlo en una casa cercana, la que sea, y dejarlo ahí. Si cuando abran la puerta los miembros no encuentran a la madre por ningún lado, el bebé es legalmente de ellos. Esto también fue un choque brutal porque ven el nacimiento de una nueva vida como algo totalmente diferente a nuestra sociedad, como si de un trozo de basura se tratase.
Paso a hablar de los personajes, que ha sido la segunda cosa que más me ha gustado después de la ambientación. Me han encantado, todos.
Connor es el típico malote con mucha rabia acumulada que tiene dotes de líder. Es un personaje que tiene de todo: partes buenas y partes malas, pero el autor sabe jugar con ellas para hacer un personaje que sinceramente me ha gustado mucho. Y del que he disfrutado leyendo. Y lo que es más importante: me lo he creído. Se nota la evolución del personaje, no de una manera muy exagerada durante la novela pero sí las consecuencias de todo lo que ocurre durante el libro se ven plasmadas en el nuevo Connor de las últimas páginas.
Risa ha sido de lo mejorcito que me he podido encontrar. Es una persona fuerte, con carácter, que no se da por vencida, muy inteligente y sarcástica. Tiene todos los ingredientes para convertirse en un personaje 10, y lo cierto es que lo es. El toque duro que puede llegar a adoptar es una de las cosas que más me gusta, sobre todo cuando lo saca. Y es muy inteligente, cosa que iréis apreciando a lo largo del libro. Eh, y pianista.
«El primer paso es el más duro, pero en ese momento decide que no correrá ni se resistirá, que no temblará ni forcejará, que recorrerá el último trayecto de su vida con andar seguro, para que dentro de unas semanas alguien, en alguna parte, reciba en la mente el recuerdo de aquel joven, fuera quien quiera, había afrontado su desconexión con dignidad y orgullo.»
Lev es un chaval de 13 años que ha vivido toda su vida dentro de las mentiras de sus padres. Comienza con las ideas relacionadas al diezmo muy, muy claras pero poco a poco se van perdiendo y el joven que empieza desde luego no es el que acaba. En un principio hay un niño engañado, testarudo y un poco pesado; y aunque al final las dos últimas siguen presentes, madura muchísimo. Es la evolución más clara y más bestia que hay en la historia pero la verdad es que está totalmente justificado y es muy creíble.
Aparecen varios personajes secundarios que sin duda le han dado mucha vida y algún puntito a la novela, como CyFI, Roland, Hayden… Ya los iréis descubriendo si decidís leerlo.
Hay historia romántica pero es que es demasiado perfecta. Bueno, no es que haya. Realmente podría considerarse un libro sin relación amorosa porque aparece en un par de escenas y ya está, pero quiero ver cómo se desarrolla en los siguientes libros que pinta muy bien. Es sencilla y bonita, muy recomendable.
Vale, punto muy importante y creo que rasgo característico del autor: las voces narrativas. El libro está estructurado en capítulos cortos, narrados por los diferentes personajes. Pero aquí está lo especial: no sólo nuestros tres protagonistas; sino personajes que van apareciendo y que a la larga no van a tener ninguna trascendencia en el desarrollo de la historia, pero sí los vas a tener presentes. Como una profesora que los ayuda en un momento determinado, o un policía. Pero esto me encantó: personas que realmente no están en la historia pero que tienen un breve capítulo para justificar los actos que van a realizar a continuación: si van ayudar a los chicos, si no… Nunca lo había visto y me ha gustado muchísimo.
Lev es un chaval de 13 años que ha vivido toda su vida dentro de las mentiras de sus padres. Comienza con las ideas relacionadas al diezmo muy, muy claras pero poco a poco se van perdiendo y el joven que empieza desde luego no es el que acaba. En un principio hay un niño engañado, testarudo y un poco pesado; y aunque al final las dos últimas siguen presentes, madura muchísimo. Es la evolución más clara y más bestia que hay en la historia pero la verdad es que está totalmente justificado y es muy creíble.
Aparecen varios personajes secundarios que sin duda le han dado mucha vida y algún puntito a la novela, como CyFI, Roland, Hayden… Ya los iréis descubriendo si decidís leerlo.
Hay historia romántica pero es que es demasiado perfecta. Bueno, no es que haya. Realmente podría considerarse un libro sin relación amorosa porque aparece en un par de escenas y ya está, pero quiero ver cómo se desarrolla en los siguientes libros que pinta muy bien. Es sencilla y bonita, muy recomendable.
Vale, punto muy importante y creo que rasgo característico del autor: las voces narrativas. El libro está estructurado en capítulos cortos, narrados por los diferentes personajes. Pero aquí está lo especial: no sólo nuestros tres protagonistas; sino personajes que van apareciendo y que a la larga no van a tener ninguna trascendencia en el desarrollo de la historia, pero sí los vas a tener presentes. Como una profesora que los ayuda en un momento determinado, o un policía. Pero esto me encantó: personas que realmente no están en la historia pero que tienen un breve capítulo para justificar los actos que van a realizar a continuación: si van ayudar a los chicos, si no… Nunca lo había visto y me ha gustado muchísimo.
«De repente, Connor salva la distancia que hay entre ellos y la besa. Risa no lo esperaba y, cuando Connor separa los labios de ella comprende, por la expresión de su rostro, que tampoco lo esperaba él.
-¿Por qué has hecho eso...?
A él le cuesta un rato poner en funcionamiento su cerebro.
-Lo he hecho -responde- por si acaso me ocurre algo y no vuelvo a verte.
-Bien -le dice ella y le atrae para darle un nuevo beso. Y este es más largo que el primero. Cuando sus labios vuelven a separarse, ella le dice-: Pues este ha sido por si nos volvemos a ver.»
-¿Por qué has hecho eso...?
A él le cuesta un rato poner en funcionamiento su cerebro.
-Lo he hecho -responde- por si acaso me ocurre algo y no vuelvo a verte.
-Bien -le dice ella y le atrae para darle un nuevo beso. Y este es más largo que el primero. Cuando sus labios vuelven a separarse, ella le dice-: Pues este ha sido por si nos volvemos a ver.»
En lo referente al ritmo de lectura: muy rápido. La escritura del autor, los cambios de las voces narrativas, los capítulos cortos y el hecho de que siempre quieres saber qué va a pasar después hacen que quieras seguir leyendo.
El final está lleno de acción y sorpresas, que acaba más o menos cerrado pero realmente yo tengo muchísimas ganas de seguir leyendo y saber algo más de estos personajes que tanto me han gustado.
Resumiendo, Desconexión es un comienzo de trilogía que recomiendo muchísimo: una trama interesante, ritmo rápido, una ambientación innovadora y unos personajes bien construidos. Una historia con mucha acción, sorpresas y un pequeño romance simple y bonito. Con unos cambios de voces narrativas y el trepidante ritmo de la novela, os aseguro que no os separaréis de sus páginas hasta que la terminéis.
4,25/5
GRACIAS A LA EDITORIAL POR EL
ENVÍO DEL EJEMPLAR.
Laura.
4 comentarios
Hola. Me alegra que te haya gustado. A mi también me encanta esta saga y la recomiendo mucho. En unos días espero empezar el último libro, a ver qué tal. Un beso
ResponderEliminarHolaa
ResponderEliminar¡Tengo muchas ganas de leerlo! Seguro que cae este año :)
que bien que te haya gustado tanto ^^ me fío de tu criterio
besitos
Hola!!!
ResponderEliminarYa conocía esta tetralogía, pero no he empezado con ella. No será por ganas, porque por todas las reseñas y opiniones que voy viendo, creo que me va a gustar mucho.
Una de las cosas que busco en una novela de este género es que haya violencia, y sea un mundo cruel (por algo es una distopía) y me alegra ver que aquí lo haya.
Y punto positivo los personajes y que el romance no tenga tanto protagonismo.
En cuanto me quite alguna que otra saga que tengo pendiente, intento empezar con esta.
Besos!
Hola Laura:
ResponderEliminarCada vez me queda más claro que tengo que empezar esta saga. Me da cosa que no lo termine de disfrutar, es que las espectativas son altas, pero me lo pienso leer. Gracias por la reseña.
Un beso ^^
Agradezco todos vuestros comentarios, son los que le dan vida al blog, pero recordad:
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¡Gracias a todos!